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domingo, 23 de febrero de 2020

Edificio Policlínico Cíes (1967)



A finales de los años 50 y principios de los 60 surgen en Vigo una hornada de jóvenes arquitectos que toman el testigo de los representantes del movimiento moderno iniciado en los años 30 con el racionalismo.

Entre estos jóvenes arquitectos que dejarán su huella en la ciudad cabe destacar a Xosé Bar Boo, Pérez Bellas, Pérez-Lorente,...

Destacan ante todo por la utilización de nuevas formas arquitectónicas y por el empleo de nuevos materiales en sus construcciones.


Uno de estos arquitectos, Xosé Bar Boo, contribuyó notablemente en 1967 a la modernización de la arquitectura viguesa con la construcción del edificio Policlínico Cíes.

Situado al comienzo de la Avenida de Madrid, el edificio, de uso sanitario, destaca por su cuerpo cilíndrico de planta elipsoidal en el que se alternan bandas de piedra y de cristal. En él, Bar Boo prescinde de los ángulos rectos; se trata un edificio de formas redondeadas.

El inmueble presenta siete alturas divididas entre sí por una franja granítica. Entre estas franjas se dispone una cristalera continua que permite una gran entrada de luz natural, algo necesario en este tipo de construcciones.


El aspecto cilíndrico del edificio sólo se altera con el adelantamiento que experimenta la fachada a la altura del acceso principal, lo que da lugar a un dislocamiento de la planta con una intencionalidad únicamente estética.


El edificio se termina en altura elegantemente con una pérgola perimetral circular sobre pilares.


A pesar de su singular aspecto, el edificio está muy bien pensado funcionalmente. Su interior está comunicado por una gran escalera de caracol y los quirófanos están pensados para desarrollar su papel: son dos círculos dentro de otra envolvente anexa al cuerpo principal, de sólo dos plantas, cubiertas por cúpulas de cristal, que permiten observar la actividad que se desarrolla en su interior.

Es uno de los máximos exponentes del movimiento moderno que surgió en Vigo y que trajo aires de renovación a la arquitectura de nuestra ciudad y un gran ejemplo de cómo combinar eficientemente la forma con la funcionalidad.